Para salvar tanto el Reino Mágico como los Cielos y restaurar el flujo de akuto, el flujo de energía de todo, el Rey Mágico Munto debe seguir una visión y encontrar a la niña Yumemi en el mundo normal. La propia Yumemi es una chica normal, salvo que es la única que puede ver las islas de los Cielos flotando por encima. Cuando Munto aparece ante ella, empieza a pensar en su responsabilidad y en la de los demás en el mundo.