Hiyori dejó su ciudad natal para perseguir su pasión, el atletismo, matriculándose en el instituto Sakuragaoka de Tokio. Buscando un trabajo a tiempo parcial en Tokio, acabó trabajando como aprendiz de gerente para sus compañeros de clase (y miembros de LIP×LIP) Yujiro Someya y Aizo Shibasaki. La historia gira en torno a la madurez de Hiyori (mientras hace malabarismos con la escuela, la vida extraescolar y la gestión) y de LIP×LIP (mientras brillan en el escenario).