El honesto y leal Kamiyama ha ido a parar al conflictivo Instituto Cromartie, donde todo el mundo es un delincuente. Como es de esperar, pasará a ser el jefe de su clase, debido a la lógica invertida de que sólo un conejito realmente duro se atrevería tranquilamente a estar entre una manada de leones. Así empieza una historia que parodia cada uno de los tópicos del anime de “tipos duros” hasta límites insospechados. Ah, y Freddie Mercury también sale.